¿Cómo es el protocolo de actuación ante un accidente con mercancías peligrosas?
En la actualidad, el transporte de mercancías peligrosas es una actividad que se lleva a cabo de forma constante y necesaria para el desarrollo económico de muchos países. Sin embargo, debido a la naturaleza de estas mercancías, existe siempre el riesgo de que ocurra un accidente durante su transporte. Es por ello que es necesario contar con un protocolo de actuación en caso de que se produzca un accidente con mercancías peligrosas.
¿Cómo debe ser este protocolo de actuación?
El protocolo de actuación en un accidente con mercancías peligrosas es un conjunto de medidas y procedimientos que deben seguirse para minimizar los riesgos y asegurar la seguridad de las personas involucradas, así como del entorno en el que se produce el accidente.
- En primer lugar, es importante establecer un plan de emergencia que contemple todas las posibles situaciones de riesgo y las acciones a tomar en cada una de ellas. Este plan debe ser elaborado por expertos en la materia y estar disponible tanto para los responsables del transporte de mercancías peligrosas como para los servicios de emergencia que puedan intervenir en caso de accidente.
- En caso de que ocurra un accidente con mercancías peligrosas, lo primero que se debe hacer es evaluar la situación y determinar el nivel de riesgo al que se enfrentan las personas y el entorno. Esto se hace a través de la identificación de las sustancias peligrosas involucradas en el accidente y la valoración de su grado de peligrosidad.
- Una vez evaluada la situación, es necesario establecer un perímetro de seguridad alrededor del lugar del accidente. Este perímetro debe ser establecido de acuerdo con las normativas y regulaciones vigentes y debe ser respetado por todas las personas presentes en la zona.
- Posteriormente, se procede a la activación del plan de emergencia establecido previamente. Esto implica la movilización de los servicios de emergencia correspondientes, así como la puesta en marcha de las medidas de control necesarias para minimizar los riesgos.
- Una vez controlada la situación de emergencia, se procede a la limpieza y descontaminación del área afectada. Esto implica la retirada de los residuos y sustancias peligrosas, así como la realización de las labores necesarias para minimizar los posibles impactos ambientales.
- Finalmente, es necesario realizar una evaluación y análisis de lo sucedido para poder extraer conclusiones y aprender de la experiencia. Esto implica la identificación de las causas del accidente, así como la revisión de las medidas de prevención y seguridad establecidas. Esta evaluación permitirá mejorar el protocolo de actuación y prevenir futuros accidentes.
Normativa que regula estos protocolos de emergencia
Las diferentes actuaciones que se deben llevar a cabo en el momento que sucede un accidente en el que están implicadas mercancías peligrosas están reguladas en el BOE a través del Real Decreto 97/2014. Concretamente, se recogen en los Artículos 20 y 21 del capítulo IV. Para completar esta normativa se hace referencia tanto al documento ADR como a las Resoluciones de la Dirección General de Protección Civil en las que se recogen y actualizan los diferentes protocolos de emergencia.
Obligatoria la comunicación del accidente
La comunicación del accidente es la principal obligación legal del conductor en caso de un suceso de este tipo. Según lo recogido en el BOE (Boletín Oficial del Estado), el conductor debe facilitar una serie de datos en esta primera comunicación. Estos datos incluyen la localización del suceso, el estado del vehículo y las características del accidente, información sobre las materias peligrosas transportadas, la presencia de víctimas, las condiciones meteorológicas y otras circunstancias de interés.
Es fundamental que el conductor proporcione esta información de manera clara y precisa a las autoridades correspondientes. Estos datos son fundamentales para poner en marcha el protocolo de actuación adecuado y garantizar una respuesta rápida y eficiente ante un accidente con mercancías peligrosas.
Asegurar y señalizar la zona del accidente
Cuando ocurre un accidente en el transporte de mercancías peligrosas, es fundamental seguir un protocolo de actuación adecuado para garantizar la seguridad de todas las personas involucradas y minimizar los riesgos. En este artículo, te presentaremos las claves del protocolo de actuación en un accidente con mercancías peligrosas. El primer paso que debe tomar el conductor involucrado en el accidente es asegurar la zona. Esto implica reducir los riesgos para el resto de los usuarios de la vía y garantizar la seguridad de todos. Uno de los aspectos a tener en cuenta es la dirección del viento. Dependiendo de la sustancia peligrosa que se haya derramado, el viento puede dispersarla y aumentar los riesgos. Por lo tanto, es importante evaluar esta variable y tomar medidas para minimizar la exposición a la sustancia.
Otro aspecto a considerar es la señalización de las tres zonas: la zona de riesgo o caliente, la zona templada donde se llevará a cabo la intervención y la zona fría o segura. Estas zonas deben estar claramente delimitadas y señalizadas para evitar que las personas no autorizadas se acerquen al lugar del accidente. Para determinar estas zonas, es necesario seguir la Directriz Básica sobre Accidentes con Mercancías Peligrosas diseñada por la Protección Civil. Esta directriz incluye las variables adecuadas para establecer las zonas de riesgo y seguridad en función de las características específicas del accidente.
Además, se deben establecer las vías de salida y entrada para los vehículos de emergencia. Estas vías deben estar claramente señalizadas y libres de obstáculos para permitir un acceso rápido y seguro al lugar del accidente. En algunos casos, puede ser necesario establecer una zona de descontaminación. Esto ocurre cuando se ha producido un derrame de sustancias peligrosas y es necesario evitar la propagación y la contaminación del entorno. La zona de descontaminación debe ser establecida por personal capacitado y contar con los equipos adecuados para llevar a cabo este proceso de manera segura.
Diferentes maniobras ante un accidente con mercancías peligrosas
Maniobra de descontaminación
La descontaminación en un accidente con mercancías peligrosas se refiere al proceso de eliminar o reducir la exposición de las personas a los agentes químicos o biológicos presentes en la zona afectada. Esta maniobra puede ser necesaria tanto para las víctimas como para los equipos de intervención, ya que todos pueden estar expuestos a sustancias dañinas durante el desarrollo de sus labores. Para llevar a cabo una descontaminación efectiva, es necesario contar con una serie de elementos básicos que garanticen la seguridad y eficiencia del proceso.
Maniobra básica de un vehículo y de dos vehículos
La maniobra básica de un vehículo y de dos vehículos en un accidente con mercancías peligrosas es llevada a cabo por los bomberos. En el caso de una sola dotación, es decir, un mando, un conductor y tres bomberos, cada uno tiene asignadas tareas específicas. El conductor será el encargado de preparar una manguera de 70 mm con bifurcación y será responsable de alimentar el vehículo. Dos de los bomberos establecerán dos mangueras y una lanza para llevar a cabo la extinción del fuego. El tercer bombero se encargará de establecer dos mangueras adicionales y conformará el equipo SOS, encargado de la atención a las posibles víctimas y de brindar apoyo a los demás equipos.
En un accidente con mercancías peligrosas, pueden estar involucrados diferentes actores, como los bomberos, la Policía, los servicios de emergencia médica y los organismos competentes en materia de medio ambiente. Una adecuada coordinación permitirá optimizar los recursos y garantizar una respuesta rápida y efectiva.
Maniobra de aproximación
La maniobra de aproximación consiste en acercarse al punto del incidente para realizar tareas de rescate o el cierre de una válvula, por ejemplo. Para llevar a cabo esta maniobra de manera segura, es necesario seguir una serie de pautas y contar con el equipamiento adecuado.
Maniobra de extinción con espuma
La maniobra de extinción con espuma es una técnica que consiste en utilizar una mezcla de agua y espumógeno para controlar y extinguir incendios provocados por sustancias peligrosas. Esta técnica es muy efectiva debido a que la espuma forma una capa protectora sobre el fuego, impidiendo la propagación de las llamas y evitando la liberación de gases tóxicos. Es importante hacerlo de manera gradual y controlada para evitar la formación de nuevas llamas o la liberación de sustancias peligrosas.
Maniobra con trajes de protección
Una de las primeras medidas a tener en cuenta es la utilización de trajes de protección adecuados. Los diferentes niveles de riesgo existentes determinarán qué tipo de traje se debe utilizar. Tanto los conductores como los trabajadores involucrados en el transporte y manipulación de mercancías peligrosas deben recibir una formación adecuada sobre los protocolos de actuación y las medidas de seguridad necesarias.